domingo, 8 de noviembre de 2020

Un cuarteto de seis

 La mujer poco probable

 


 

            






Que la proximidad de la muerte es una usina de relatos nadie lo duda, así como tampoco de la certeza (absolutamente incomprobable) de que en los últimos instantes vemos pasar la película completa de nuestra vida. Y aunque no estén frente a un pelotón de fusilamiento, sino dentro de un avión con el tren de aterrizaje roto, los protagonistas de esta novela, Martina y Leo -un matrimonio de más de dos décadas- repasan su vida en común y desarman ese entramado de relaciones peligrosas que es el parentesco, una estructura elemental más parecida al modelo de las muñecas rusas que al árbol genealógico.

            Y este viaje último que emprenden “para ahogarse o salvarse” los encuentra a cada uno en su propia burbuja, simbólicamente sentados en asientos separados, incapaces de ofrecerse consuelo o protección y preguntándose qué los llevó a elegirse uno al otro. Y es en un pasado común cuyo origen se remonta a Rusia y en algunos personajes-satélites (un amante de Martina, padre biológico de su segundo hijo y una amiga del matrimonio, eterna enamorada de Leo) donde se juega la posibilidad de ese encuentro que nunca es fortuito y que convierte a la familia en “un mecanismo que funciona”, un engranaje que sigue girando a pesar de sus dientes averiados.

            Pero como lo siniestro (aquello del orden de lo familiar destinado a permanecer oculto que ha salido a la luz, según una definición ya clásica) pareciera estar mucho más presente de lo que nos gustaría admitir, es a partir de sus zonas oscuras desde donde ambos construyen ese objeto polimorfo que es la familia tipo. Le tocará al lector decidir si finalmente servirá para salvarse o ahogarse.

Publicado en diario Perfil 8/11/2020

domingo, 1 de noviembre de 2020